Caso Puerto Vallarta

Categoría: Place Branding

El Reto:

Puerto Vallarta gozó, tanto en México como en el extranjero, de una gran reputación como destino turístico durante casi cuatro décadas. Sin embargo, para los noventas su concepto y propuesta de valor ya mostraban signos de cansancio y habían perdido relevancia, sobre todo, ante el surgimiento y florecimiento de destinos como Cancún, Los Cabos y recientemente, las “rivieras” de México.

¿Cómo reposicionar una marca antigua ante un mercado en tremenda evolución y con nuevos estándares y expectativas?

La Solución LIME:

• Cualquier estrategia a desarrollar tendría que pasar por el filtro de muchísimos stakeholders de la industria turística vallartense. Por ello, decidimos llevar a cabo una serie de workshops que generaran una visión común y fomentaran un espíritu de grupo y de una causa en común. 
• En base a un estudio de mercado internacional, creamos un nuevo perfil del viajero internacional que buscabamos atraer: el masterblender; un viajero que busca experiencias mas que lugares, que mezcla el placer con el trabajo, que se mantiene permanentemente conectado y que ya está cansado de productos “empaquetados”, genéricos y artificiales. 
• En un Pow Wow Estratégico de LIME desarrollamos nuestro BrandDNA® para la marca, definiéndola de una manera única y relevante para los masterblenders internacionales de hoy; así, los tres pilares diferenciadores que hoy sustentan su propuesta de valor son: su autenticidad mexicana, su entorno único de mar y montaña y la gente maravillosa con la que el turista interactúa. 
• Finalmente, guiamos el desarrollo de un nuevo logo, plataforma de diseño y campaña de comunicación que dramatizaron la nueva propuesta de la marca para proyectarla con confianza y optimismo al mundo.

Resultado:

Basada en la nueva campaña de «You Live it More than Once», inspirada en la estrategia de reposicionamiento de LIME, Puerto Vallarta revirtió una preocupante tendencia a la baja de años. En los últimos tres, ha logrado índices de ocupación récord, un incremento en el flujo de turistas de doble dígito y una mejora sustancial de su valor percibido, generando con ello un mayor ingreso y margen para un amplio espectro de protagonistas de la industria turística local. Un reposicionamiento que le da una nueva vitalidad para varias décadas más.